ella no creía en los finales felices, pero quería que le demostraran que estaba equivocada

Dos corazones rotos no van bien juntos.

Toma su mano y la lleva a sus labios, la besa con delicadeza, con una sonrisa arrebatadora. Ella esta perdida en su mirada.
Ambos bailan por unos minutos, pequeños y mágicos instantes que tal vez no se repitan de nuevo.
Los labios de él viajan por su cuello, sacándole una sonrisa inocente a la chica.
Mientras tanto, ella, la otra chica, los observa, escondida entre la multitud, una máscara azul turquesa reposando en su cara. Él no la visto, lleva una máscara negra, una de esas sencillas que esconden más de un secreto.
Su corazón se rompe más a cada paso que da junto a la chica de la máscara rosa, rosa claro.
Una lágrima escapa de sus ojos, pero nadie lo nota, su sonrisa bien fingida engaña a la gente, la máscara esconde la tristeza.
Por un segundo, los ojos de ella se encuentran con los de él. Él la observa por unos segundos, la reconoce de inmediato, pero no hace ademán de moverse. No hace nada, ni una sonrisa, ni un guiño. Solo la observa, diminuta entre tantas personas, perdida. Entonces él desvía la mirada.
Ella sabe que lo ha perdido, para siempre, que jamás volverán a estar ellos dos contra el mundo. Y duele, mucho, pero no hay nada que pueda hacer, dos corazones rotos no van bien juntos.

1 comentario:

  1. Que bonito. se siente tan triste y melancólico... Hay veces que ocultamos todo lo que sentimos tras una mascara, pero no nos podemos engañar a nosotros mismos...
    Saludos de la chica de los chicles, que un día ella fue la de la mascara azul
    http://lachica-deloschicles.blogspot.com.es/

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