ella no creía en los finales felices, pero quería que le demostraran que estaba equivocada

Demuestra que puedo amarte.

–No puedo, simplemente no puedo.
Negaba con la cabeza desesperadamente, tratando de huir de sus propios pensamientos.
–¿Por qué no? –preguntó él acercándose a abrazarla.
–¡No! –gritó ella alejándose– No puedo, no esta en mi naturaleza.
–¿Por qué? Solo dame una maldita razón, te amo, joder.
Ella empezó a sollozar.
–No es cierto, no me amas. Solo me quieres, o crees amarme, pero no lo haces. Por eso no puedo.
–¡Claro que te amo!
–No, ¡no lo haces! Y yo tampoco a ti, porque no puedo amar, solo hay una manera de amar y no puedo.
–Si te amo.
–Entonces huye –susurró ella, con desesperación– huye conmigo y demuestra que me amas, demuestra que puedo confiar en ti, demuestra que puedo amarte. Sino serás solo uno más y no podré aguantarlo porque al final romperás más mi corazón y eso me mataría.
Él se quedó sin palabras, no tenía idea de por qué ella quería huir.
–¿Lo ves? –dijo ella– Estoy rota, no puedes hacer nada por mi, no puedes componerme. Así como yo no puedo amarte.
Entonces huyó de ese lugar, sola y en miseria, dejando al confuso chico detrás. ¿Lo quería? Si, y mucho, pero no podía permitirse amarlo si eso significaba salir herida después.

4 comentarios:

  1. Y dicen que deberíamos de pensar menos y sentir más.

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  2. Oh, me identifiqué demasiado. A veces te encierras en ti mismo, por miedo a que te lastimen, porque sabes que estas rota, que no podrías soportar nada más, porque tan solo pueden hacerte daño aquellas personas a quienes quieres realmente. Hermoso *-*

    Besos

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  3. Pues si, muchas veces nos arriesgamos y acabamos mucho peor que si tal vez nunca lo hubiéramos intentado.

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  4. Pues a mi me parece una cobarde, qué quieres que te diga.

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Si dejas un comentario me empaparás de la lluvia de la felicidad.